Nuestra axiología
La Institución Educativa Parroquial “Santa Teresa de Jesús” lleva impresa la herencia del Carmelo Teresiano, fundamenta su acción educativa en una concepción cristiana del ser humano, la vida y el mundo. Creen en el Evangelio de Jesucristo, en el Magisterio de la Iglesia y se inspira en el estilo de vida de Santa Teresa de Jesús, modelo de virtudes.
Según el carisma de Santa Teresa de Jesús, la Institución Educativa es una familia donde se cultiva el diálogo, la amistad, la alegría, la confianza, la solidaridad, el encuentro con Dios y con el prójimo, ejercitando la oración y el compromiso eclesial. Se orienta por las normas constitucionales que rigen para la Educación Peruana, la Ley General de la Educación y por los documentos eclesiales que orientan la Escuela Católica, la Propuesta Educativa de Las Carmelitas Misioneras y otros, que fomentan el derecho a la educación integral.
Nuestro Modelo Educativo Cristiano
Optamos por un modelo educativo abierto a la trascendencia, favoreciendo la integración entre la fe, la razón y la cultura, afirmando la identidad personal.
Desarrollamos en las niñas y los niños el sentido de pertenencia e identidad con su realidad familiar, social y cultural.
Priorizamos la participación activa y solidaria de los estudiantes en la vida familiar, social, escolar, afirmando los valores cívico-patrióticos, culturales y religiosos.
Brindamos apoyo al personal de la comunidad educativa para su actualización y capacitación, formativa-pedagógica, fomentando una educación de calidad.
Motivamos a los padres de familia a participar y colaborar en las diferentes actividades formativas y recreativas que organiza la IEPq.
IDENTIDAD TERESIANA
LECTURA. “Si no tenía un libro nuevo no me parecía tenía contento (Vida 1,5)
ORACIÓN. “No es otra cosa oración mental, a mi parecer, sino tratar de amistad, estando muchas veces tratando a solas, con quien sabemos nos ama” (Vida 8,5)
EDUCACIÓN EN EL HOGAR. “Es propio de los hijos errar y de los padres perdonar, y no mirar sus faltas (Epistolario, 98).
FRATERNIDAD. “Aquí todas han de ser amigas, todas se han de querer, todas se han de amar, todas se han de ayudar” (C4, 7)
AMOR ECLESIAL. “… Como veo las grandes necesidades de la Iglesia, que éstas me afligen tanto…” (R, 3-7)
DEVOCIÓN MARIANA. “Agrada mucho al Señor cualquier servicio que se le haga a su Madre, la Virgen María” (F. 105)
PERFIL DEL ESTUDIANTE TERESIANO
- El niño/a vivencia su fe cristiana en la práctica de los valores evangélico-teresianos, defiende la vida, la justicia, la libertad y es constructor de un clima fraterno.
- Es responsable, creativo, reflexivo, analítico, sensible y con una participación activa y solidaria frente a los desafíos que presenta la vida.
- Expresa libremente sus aciertos y errores, dando alternativas de solución a los problemas del entorno familiar, escolar y social.
- Participa en la elaboración, organización y construcción de su propio conocimiento a través de aprendizajes significativos.
- Desarrolla el compromiso de ejercitar los derechos, deberes y responsabilidades como estudiante, como hijo/a y como parte de la sociedad.
- Vive los valores evangélicos, participando en actividades que dinamicen su sentido su sentido de pertenencia eclesial.
- Expresa la fraternidad con actitudes que favorezcan la unión, anunciando la unidad en un mundo individualista.
- Asiste a todas las actividades culturales, artísticas, eventos deportivos, excursiones que se realizan en forma permanente y son criterio de evaluación porque son parte de su formación integral.